El cloud como catalizador de oportunidades para las pymes

La nube es una tecnología fundamental en los planes de continuidad del negocio de las empresas, lo que ha quedado muy patente a raíz de la pandemia. Se dice que en el último año hemos visto un crecimiento del mercado cloud equivalente al esperado en cinco años por lo que se puede decir que el coronavirus ha tenido más influencia en la expansión del cloud que el trabajo llevado a cabo por la industria durante años.

No estamos hablando ni mucho menos de un escenario de ciencia ficción, sino de una realidad actual como queda reflejado en el último informe de Eurostat, donde se afirma que un 26% de las empresas españolas de más de 10 empleados ya están utilizando los servicios en la nube para el desarrollo de su actividad. Lo que ha provocado la pandemia es que aumente la velocidad a la que las empresas se han involucrado en la digitalización.

En este mundo cada vez más digital, el paso a la nube ya no es una opción sino una necesidad y prácticamente una obligación imperiosa para la supervivencia de las empresas, cualquiera que sea su sector y su tamaño. Y es que las pymes, que por lo general se encuentran más atrasadas tecnológicamente porque necesitaban grandes inversiones para digitalizarse, encuentran en la nube la solución a este problema. Con el cloud los servicios se facturan en un modelo de cuotas mensuales y únicamente se paga por aquellos recursos que se utilizan, democratizando el acceso a la tecnología o y convirtiendo las costosas inversiones tradicionales en equipamiento en un gasto asumible para empresas de cualquier tamaño.

Junto a la democratización del acceso a la tecnología ya mencionado, el cloud ofrece a las pymes otro elemento clave para ayudarles a crecer: la agilidad y flexibilidad en el consumo de servicios tecnológicos y en la creación de entornos altamente personalizables, a la medida de cada pyme, lo que se traduce en mejores tiempos de respuesta ante imprevistos o ante cambios en el volumen de negocio.