Una estrategia de servidor es clave para el futuro de tu empresa
- Estrategias
Desarrollar una estrategia eficaz que cubra todo el ciclo de vida de tu infraestructura de servidor implica dos aspectos: saber cuándo los servidores han quedado obsoletos y tener un plan de acción listo para cuando llegue el momento de reemplazarlos por otros más modernos, como los servidores HPE ProLiant Gen9 con procesadores Intel® Xeon®.
En un mundo perfecto, los servidores durarían para siempre y escalarían en potencia, capacidad y eficiencia a medida que pasaran los años. Desafortunadamente para las pequeñas y medianas empresas, los servidores no duran para siempre. De hecho, a medida que la tecnología continúa innovando a un ritmo abrumador, los servidores parecen tener una vida útil cada vez más corta. Es por ello que el desarrollo de una estrategia de servidor que cubra todo su ciclo de vida es más importante que nunca.
A pesar de la necesidad obvia de mantener la infraestructura de servidores actualizada, muchas organizaciones no disponen del tiempo y el dinero necesarios para ello. Un artículo de The Pulse of IT te da algunas pautas para desarrollar una estrategia de servidor efectiva.
El primer paso para establecer una estrategia de servidor eficaz es saber cuándo tienes que reemplazar el hardware existente. Para ello esto, hazte algunas preguntas básicas: ¿Tu infraestructura de servidor cumple con las demandas de cargas de trabajo actuales? ¿Será capaz de acomodar las futuras cargas de trabajo? ¿Cómo influiría el despliegue de nuevos servidores en factores como el coste, el espacio, etc.? Si no estás completamente seguro de que tu infraestructura de servidor puede seguir generando resultados de negocio exitosos a corto plazo, o si los beneficios de ahorro, espacio y prestaciones de los nuevos servidores superan los costes de implementación, probablemente sea una buena idea apostar por una renovación.
Diagnosticar si tu infraestructura necesita un cambio es sólo la mitad de la tarea cuando se trata de diseñar una estrategia de servidor que cubra todo su ciclo de vida. La otra mitad, y la más difícil, consiste en averiguar cómo encajarán las nuevas piezas con las viejas. Cualquier actualización potencial debe ser cuidadosamente examinada con los sistemas existentes para asegurarse de que la transición sea perfecta. Por lo general, es una buena idea llevar a cabo una prueba de concepto in-situ antes de desplegarla plenamente.
También puedes valorar otros enfoques, como un servidor virtual, que podría realizar la misma tarea que el servidor actual, así como diferentes configuraciones para el almacenamiento y la memoria, que podrían ser más eficientes que el servidor existente. Incluso algo tan aparentemente insignificante como optar por discos en estado sólido en lugar de discos duros puede suponer una gran diferencia para tus cargas de trabajo.
Si estás valorando el cambio, los servidores HPE ProLiant Gen9 con procesadores Intel® Xeon® dan a las pequeñas empresas maneras de mejorar su productividad, ser más eficientes y aumentar sus ingresos. Estos servidores lo aceleran todo y prácticamente no desperdician nada, ofreciendo un rendimiento de carga de trabajo cuatro veces más rápido y una capacidad de procesamiento tres veces mayor.
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