IA y Big Data, claves para el ahorro energético en las empresas españolas
- Transformación digital
El Día Mundial del Ahorro de Energía, que se celebra hoy 21 de octubre, recuerda la importancia de conservar los recursos naturales y lograr eficiencia en el área energética.
Softtek asegura que la implementación de inteligencia artificial (IA) y Big Data está transformando la manera en que las empresas españolas gestionan su consumo energético. La compañía ha destacado en su reciente White Paper ‘Tech Trends: Energy & Utilities’ que la digitalización es el catalizador que permite que progresen la descarbonización y la descentralización.
Las innovaciones tecnológicas están impactando de una manera positiva tanto en el ahorro de costes operativos como en la sostenibilidad. En España, gracias al crecimiento de las energías renovables, un 77,2% de la electricidad generada durante julio de 2024 fue libre de emisiones de CO2 equivalente, según datos de Red Eléctrica. Softtek ofrece las claves tecnológicas para el ahorro energético con el objetivo de que el ecosistema empresarial español crezca de un modo sostenible:
Monitorización en tiempo real: las herramientas de IA ayudan a supervisar y controlar el consumo energético de las instalaciones. Proporcionan datos en tiempo real sobre el uso de la energía, lo que contribuye a detectar anomalías y facilitar la identificación rápida de ineficiencias o desperdicios. Así, las empresas pueden implementar medidas correctivas al instante y reducir costes.
Optimización predictiva: la IA permite prever picos de demanda energética al analizar datos históricos y patrones de consumo. Este enfoque predictivo ayuda a las empresas a ajustar su consumo de manera eficiente, lo que evita sobrecargas y optimiza el uso de la energía en función de las predicciones. Con esta información, las empresas pueden mejorar la gestión de su suministro energético.
Análisis de eficiencia operativa: la combinación de Big Data e IA facilita una evaluación integral de la eficiencia de los procesos productivos. Al analizar grandes volúmenes de datos, estas tecnologías permiten identificar áreas donde se puede reducir el consumo sin comprometer la productividad. De este modo, las compañías pueden optimizar sus operaciones y reducir su huella de carbono.
Mantenimiento preventivo: al monitorizar y analizar datos de una forma continua, estos sistemas identifican signos de desgaste o mal funcionamiento. Así, las empresas serán capaces de realizar mantenimientos preventivos. Esto evita interrupciones en la producción y el desperdicio de energía asociado a fallos inesperados.
Gestión inteligente de recursos: la automatización avanzada y el control de los sistemas energéticos permiten gestionar eficientemente la energía en cada área de la empresa. Las soluciones basadas en IA ajustan dinámicamente el consumo energético según las necesidades y condiciones operativas.
Estrategias de energía renovable: la integración de la IA posibilita maximizar el uso de fuentes renovables como la energía solar y eólica. Este enfoque no solo reduce la huella de carbono de la empresa, sino que también apoya la transición hacia un modelo basado en la sostenibilidad.
Benchmarking energético: comparar el rendimiento de la empresa con los estándares del sector permite identificar áreas de mejora. Esto ayuda a detectar deficiencias y oportunidades en el mercado. Mejorar estas prácticas es clave para mantener una posición competitiva en términos de eficiencia y sostenibilidad.