Descubre cuál es el modelo cloud más adecuado para tu empresa
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La nube optimiza los procesos de la empresa, añadiendo los componentes de escalabilidad, movilidad y trazabilidad a un proyecto y favoreciendo el trabajo colaborativo. Y eso desde un punto de vista operativo, pues, desde el económico, permite reducir costes en software y equipos. Sin embargo, para aprovecharse de estos beneficios es clave elegir bien el modelo.
Tener presencia en redes sociales, utilizar plataformas o aplicaciones de comunicación interna y externa, y gestionar el negocio con programas online, son todos pasos relevantes en el camino que lleva hacia la Transformación Digital de una empresa. Sin embargo, si hay una infraestructura clave sobre la que se asienta la digitalización, y esa es la nube, pues permite almacenar y gestionar toda la información generada por la empresa de manera online en cualquier lugar, en cualquier momento y desde cualquier dispositivo.
La nube es hoy en día una realidad en muchas corporaciones, principalmente por las ventajas que supone para los procesos empresariales. Por un lado, los costes son mucho menores que los asociados a instalar soluciones de software y hardware para el almacenamiento de datos en la infraestructura propia de la empresa, ya que las empresas se benefician de la solución de un proveedor Cloud al que pagan exclusivamente por su uso, el cual garantiza la accesibilidad, soporte, mantenimiento y seguridad de la información. Por otro lado, con un modelo IaaS (Infraestructura como Servicio), los tiempos de implantación y posterior utilización se reducen, el acceso es más rápido y la flexibilidad mucho mayor, y si necesitas más recursos para tu actividad se aumenta el servicio sin comprometer el correcto funcionamiento.
Vemos las ventajas, pero a la hora de implantar la nube no todas las empresas tienen las mismas necesidades. Como señala Ideas para tu Empresa, una mala elección del modelo puede suponer un sobrecoste o un fracaso en su implementación, pues en vez de facilitar el trabajo, el resultado será el totalmente opuesto. Por esto, es importante saber qué modelos existen y qué implicaciones tiene cada uno para tomar una decisión de negocio acertada.
A la hora de adoptar una estrategia Cloud, es fundamental un planteamiento previo detallado cuyo objetivo será el de dar con la solución perfecta para las necesidades empresariales. Algunos aspectos que debes plantearte en esta fase son con qué cantidad de datos cuenta tu empresa, qué grado de tratamiento requieren, nivel de criticidad y seguridad de los mismos, que disponibilidad de los mismos precisas y qué nivel de servicios de soporte se requiere por parte del proveedor Cloud.
La elección de la tipología de Cloud es un paso crítico para alcanzar el éxito en una estrategia Cloud. Está la cloud privada, en la que el acceso a los datos es exclusivo para la empresa, y donde la seguridad, capacidad de personalización y rendimiento de la solución son requisitos críticos; la Cloud pública, en la que los datos están ubicados en servidores externos en infraestructuras compartidas con otros muchos clientes, y que normalmente son utilizados en aplicaciones con bajos niveles de personalización y en entornos en los que la seguridad o la cercanía de los servidores de datos no es un requisito crítico; y la Cloud híbrida, una solución mixta, en la que, dependiendo de la tarea o la actividad, el servicio de nube privada se puede complementar con uno público.
En general, si los requisitos de cantidad de datos, seguridad y criticidad o disponibilidad son elevados, necesitas una Cloud privada, y si no son tan exigentes, en un esquema de Cloud Pública, de una forma más estándar, sin tanta personalización y sin tantos requisitos de seguridad, puedes acceder un servicio de una forma muy ágil.
Una vez detectadas las necesidades, los objetivos o retos y la solución más adecuada, es el momento de tomar una decisión acerca del proveedor del servicio Cloud.