La tienda física pierde relevancia a favor de la compra online
- Estrategias
Comprar a través de Internet se ha convertido en algo habitual en los españoles y el porcentaje de compras que se realizan online en España (12%) ya es superior a la media europea (11,7%). De cara al nuevo año, las tendencias relacionadas con el comercio electrónico seguirán una senda ascendente.
Poder comprar a cualquier hora del día, evitar desplazamientos y aglomeraciones, no tratar con vendedores, gastos de envío gratuitos, facilidad para realizar devoluciones, y fácil navegación son los factores que han disparado la venta por Internet. Según el Observatorio Cetelem en su informe eCommerce 2019 ’Smart Consumer, el consumidor español conecta con la compra inteligente’, el 27% de los encuestados afirma realizar ya una o varias compras online por semana, y aquellos que llevan a cabo varias compras por semana han pasado de ser un 5% en 2015, a un 11% en 2019.
Aunque la gran mayoría de consumidores encuestados afirma acudir a la tienda física de vez en cuando antes de realizar su compra online (63%), el 32% de los compradores online se muestra rotundo y afirma no acudir nunca a la tienda física antes de comprar online. En el lado opuesto nos encontramos con el 6% que, por el contrario, afirma visitar siempre la tienda antes de realizar su compra por Internet.
Comprar por Internet se ha convertido en un compañero inseparable. Según los datos publicados por ONTSI, el comercio electrónico B2C en España creció en términos absolutos de 31.347 millones de euros en 2017 a 41.509 en 2018. Es decir, un incremento anual del 32,4% frente al 24,1% registrado en el año 2017. Y es que, a pesar de la crisis, el comercio electrónico B2C no ha parado de crecer. Teniendo en cuenta la tendencia de crecimiento del eCommerce (con tasas interanuales superiores al 20%), ya se anticipa que la facturación en 2019 alcance los 50.000 millones de euros.
De cara a los tres próximos años, el comercio online seguirá ganando peso al comercio tradicional, siempre con el foco puesto en el cliente y en ofrecerle lo mejor, y todo ello de la mano de los avances tecnológicos que veremos en el futuro próximo. Por ejemplo, el teléfono móvil será un aliado. Si, en 2015, una de cada cuatro personas encuestadas por El Observatorio Cetelem utilizaba su dispositivo móvil, ese porcentaje se ha disparado hasta el 68% en 2019, lo que representa un incremento del 43%.