Claves para escoger un SAI que garantice la continuidad en aplicaciones industriales

Si bien los sistemas de alimentación ininterrumpida (SAI) en centros de datos son fundamentales para la continuidad empresarial y la protección financiera, en otros casos, la pérdida de energía sería desastrosa. Piensa en una fábrica de petroquímicos o una embarcación en altamar, en donde la pérdida de energía es una cuestión de seguridad personal o incluso de vida o muerte, o en una planta de ensamblaje, donde un fallo energético resultaría en la pérdida de inventario y de muchas horas de trabajo.

A la hora de escoger la solución correcta al implementar SAI en aplicaciones industriales, los clientes deben analizar muchos puntos. Schneider Electric señala cinco puntos a analizar antes de elegir un SAI para aplicaciones industriales críticas;

Entorno

El entorno donde se ubicará el SAI revela cuál es el indicado. Un SAI que será utilizado en un centro de datos típico debe funcionar bien a temperaturas de 0° a 40°C, con una humedad relativa de 0 a 95 y debe contar con protección para prevenir daños ocasionados por manipulación, herramientas, residuos y cables sueltos. Esto no vale para un SAI instalado en una embarcación en altamar o en un campo de exploración petrolera. Las vibraciones y la estabilidad podrían ser un problema en otros casos, tales como el suelo de una fábrica, un barco o áreas con riesgo de terremotos.

Estos entornos extremos necesitan SAI especiales y resistentes para tales condiciones. Existen varios certificados y diseños ofrecidos por NEMA (Agencia Nacional para el Manejo Ambiental), OSHPD (Oficina para la Planeación y Desarrollo de Salubridad), entre otros, para enfrentar condiciones tales como la corrosión externa, el calor, el agua residual o rociada y la humedad extrema. La clave consiste en trabajar con un ingeniero o un vendedor de SAI para acordar los requisitos especiales y así elegir o personalizar el sistema ideal para el entorno.

Perfil de carga

El SAI deberá adecuarse a las propiedades eléctricas, o perfil de carga, del equipo que se quiere proteger. Toma en cuenta la carga máxima que el SAI va a proteger y si ésta carga por lo general se da en ráfagas cortas o en intervalos largos. Algunos equipos, como impresoras industriales o en 3D, guillotinas láser y escáneres, tienen características que podrían incrementar los requerimientos de carga del SAI que los protege o aumentar los complementos de filtrado que se necesitan. El tipo de SAI que se elija también depende de si se utiliza una unidad de frecuencia variable o un kit de arranque suave en una carga de motor.

De nuevo, se requiere de una asesoría competente de un ingeniero o de un asesor de ventas, para evaluar la carga que se debe proteger y escoger con cuidado el mejor SAI.

Eficiencia

Otro criterio de selección para un SAI es la eficiencia energética. Mientras un modelo más eficiente puede costar más al comienzo, logra obtener un ahorro de alrededor del 5% en su vida productiva comparado con otros modelos.

Integración de redes

Hoy en día, casi todo se puede supervisar, pero solo si está conectado. Cualquier SAI apto para las aplicaciones críticas deberá tolerar administración, ya sea por medio de tarjetas de gestión de redes, o sencillamente de interfaz de redes, así como protocolos tales como SNMP. Desde que pueda conectarse a una red cercana, ya sea Ethernet, Modbus o una red en serie, podrá introducir datos de administración del SAI en cualquier aparato de monitorización que esté utilizando.

Por supuesto, hay que verificar que el SAI cuenta con un buen registro de seguridad, con características como una autenticación y un cifrado sólido.

Experiencia

Las aplicaciones críticas solo deben ser confiadas a los vendedores de SAI que tengan buena reputación.  Averigua sobre su experiencia en la industria, el tiempo de respuesta si hay una urgencia, y los complementos disponibles. Un vendedor experimentado te ofrecerá opciones de seguridad adicionales tales como protección para la alimentación posterior y paneles frontales lisos.