Claves para satisfacer las expectativas de una plantilla cada vez más móvil
- Ultramovilidad
A medida que el papel de la tecnología como facilitador del trabajo continúa creciendo, las limitaciones sobre dónde, cómo y cuándo trabajar comenzarán a desaparecer. La rigidez del trabajo de oficina será desplazada por formas más convenientes, productivas y confortables de trabajar apoyadas por una tecnología que se está haciendo realidad.
Se espera que la mano de obra móvil a nivel mundial aumente de 1.450 millones a 1.870 millones en 2022, a medida que las personas se aprovechen de su derecho al trabajo en sus hogares, así como de su capacidad de trabajo móvil. Y es que existe una correlación directa en Europa entre el trabajo flexible y la felicidad y el compromiso de los empleados, demostrando que los beneficios de tal enfoque funcionan en ambos sentidos.
Como señala el whitepaper “Comprendiendo el trabajo flexible en la actualidad” de Toshiba, la superación de la dependencia de una ubicación centralizada para el trabajo diario transformará las necesidades de los espacios físicos de trabajo, haciendo más hincapié en las salas de reuniones (del 20% o 25% actual al 50%) y en los espacios de trabajo en colaboración, en lugar de en los puestos de trabajo individuales. En la actualidad, una proporción importante de personas desean escapar de sus escritorios (39%) y encontrar lugares para cargar energía (40%), algo que el trabajo flexible permite de forma natural.
Esto significa que los equipos de TI necesitan integrar soluciones más flexibles dentro del lugar de trabajo, tales como estaciones de acoplamiento que cubren todo el parque de dispositivos. Pero la tarea más importante es implementar una infraestructura para el trabajador en remoto, una que proporcione el acceso más seguro posible a las redes centrales, manteniendo la facilidad de comunicación, y otra que garanticen altos niveles de productividad sin importar la ubicación. Un ejemplo son las Infraestructuras de Escritorio Virtual (VDI) robustas, así como la utilización de dispositivos que todos los departamentos puedan manejar cómodamente.
Los teléfonos de oficina y los faxes son considerados cada vez más ineficaces por las generaciones más jóvenes para mensajería instantánea, videollamada o aplicaciones de colaboración, así como para cambiar continuamente entre dispositivos conectados y aplicaciones móviles.
También es probable que, en el futuro, la Inteligencia Artificial (IA) mejore la experiencia de los empleados al generar nuevos conocimientos sobre sus preferencias y comportamiento. Por ejemplo, mediante la extracción de datos sobre interacciones pasadas, la IA podría incitar a los empleados a incluir reuniones en el calendario para los contactos con los que se ponen al día regularmente, o alentar reuniones periódicas con personas con las que tenemos menos contacto. La AI también podría ser clave para gestionar las cargas de trabajo y accionar la mentalidad "on" constante de los trabajadores en el futuro, empezando por la posibilidad de asistentes virtuales en los próximos cinco años. De hecho, en este caso, la introducción de la IA y la automatización es positiva por beneficios como la disminución de las horas extras y el estrés. La realidad virtual y la realidad aumentada también podrían convertirse en dispositivos muy importantes en una era en la que la comunicación cara a cara no hace más que disminuir.