El 72% de los españoles cree que el impacto de la tecnología será positivo
- Transformación digital
Pese a que no poseemos una sólida posición académica y nuestro gasto en I+D es muy bajo, España posee un sector TIC sólido y supera a otras economías en términos de privacidad de los datos. Las empresas españolas deben abrazar las tecnologías digitales y obtener mayores niveles de compromiso digital.
La economía digital es la actividad económica impulsada por el uso de tecnologías digitales. Nadie duda de que el éxito de las marcas y las empresas pasa por adaptarse a la economía digital en la que ya estamos inmersos, pero a veces se obvia el hecho de que esta economía tiene que estar centrada en las personas. Para llenar esta laguna, Dentsu Aegis Network ha presentado el Índice de la Sociedad Digital 2018, que examina el compromiso de los ciudadanos con este tipo de economía.
Elaborado en colaboración con Oxford Economics, el Índice analiza el grado de transición digital que están llevando a cabo diez países, entre ellos España. De acuerdo con los datos recabados, aún queda aún camino por recorrer para situarnos a la par que las economías más avanzadas. Concretamente, España se sitúa de media en el 7º puesto en relación con su capacidad para desarrollar una economía digital que beneficie a toda la sociedad.
Por otro lado, no poseemos una sólida posición académica y nuestro gasto en I+D es el más bajo de todos los países analizados, lo cual contribuye a nuestra poca capacidad innovadora. Además, el informe destaca que, mientras que la industria tecnológica española se ha desarrollado bien, otros sectores no se encuentran muy comprometidos con la transformación digital en la misma medida que sí lo están en otros países. Sin embargo, aparte de la solidez de su sector TIC, España supera a otras economías en términos de privacidad de los datos, con un marco legal y regulatorio de gran calidad.
Uno de los puntos importantes de este índice es el compromiso digital, que es la proporción de ciudadanos que confía en que el impacto de la tecnología digital sería positivo, en la que en España se sitúa ligeramente por encima global, con un 48%. Además, el 72% de los encuestados españoles creen que el impacto de la economía digital en próximos 5 a 10 años será más positivo, el 30% confía en su capacidad para crear puestos de trabajo. Si hablamos de la capacidad para afrontar retos sociales como la pobreza, riesgos sanitarios o degradación del medio ambiente, en nuestro país lo considera así el 41%.
Las empresas españolas, así como las instituciones públicas y las marcas deben obtener mayores niveles de compromiso digital, y para ello deben impulsar la formación permanente en habilidades digitales; aumentar la transparencia en el uso de los datos personales; y desarrollar entornos de trabajo que permitan a los empleados utilizar sus habilidades digitales. Las marcas, por su parte, pueden habilitar programas que generen compromiso digital con tres enfoques: generar confianza a través de una mayor transparencia; siendo claros sobre el propósito de la marca y aumentando el impacto emocional de los productos y servicios digitales.