4 de cada 5 empresas no estaban adaptadas al teletrabajo antes de la pandemia
- Productividad
A la hora de seleccionar el ordenador con el que trabajar, las pymes y las empresas declaran que la velocidad del mismo es lo más importante para ellas, seguido del rendimiento que ofrece, la conectividad y la memoria RAM. En cuanto al tipo de mejoras hechas a los equipos, las más habituales han sido la inclusión de periféricos y la ampliación de la memoria.
Tras más de un año desde el confinamiento, las empresas han aprendido qué necesitan y qué valoran de forma positiva para que los empleados puedan realizar su labor con efectividad. En este sentido, más del 80% de las empresas no estaban adaptadas al teletrabajo antes de la irrupción de la pandemia, de forma que han tenido que invertir en la actualización de sus equipos. Así se desprende de una encuesta elaborada por ASUS y el Instituto de Investigaciones de Mercado y Marketing Estratégico Ikerfel, que analiza las necesidades a nivel de equipamiento informático que presentan tanto las personas como las pymes y grandes empresas ante el incremento del teletrabajo y la nueva realidad del trabajo híbrido que se ha asentado en España.
De acuerdo con el informe, el 41% de las organizaciones ha tenido que comprar nuevos portátiles para que sus trabajadores pudieran trabajar. Además, pese a que 7 de cada 10 compañías que ha facilitado un ordenador portátil a los teletrabajadores ya contaba con, al menos, la mitad de los equipos, un 19% ha tenido que implementar mejoras para adaptarlos a las nuevas necesidades. Todas estas cifras arrojan una conclusión clara: los departamentos de TI han tenido que funcionar a contrarreloj para poder cubrir toda la nueva casuística y que el trabajo pudiera desarrollarse con normalidad y fluidez.
A la hora de seleccionar el ordenador con el que trabajar, el 63% de las compañías valora principalmente las especificaciones de los equipos y un buen rendimiento. Además, en este proceso de selección y adquisición, un tercio de las mismas también considera importantes las cuestiones relacionadas con la rentabilidad del dispositivo, es decir, la calidad, el precio, que sea un producto recomendado, que tenga un buen servicio técnico, etc. En lo que respecta a los elementos o características más importantes a la hora de decidir qué equipo informático comprar, las pymes y las empresas declaran que la velocidad del mismo es lo más importante para ellas (74%), seguido del rendimiento que ofrece (69%), la conectividad (62%) y la memoria RAM (60%).
En cuanto al tipo de mejoras hechas a los equipos por las que se han decantado las empresas, las más habituales han sido la inclusión de periféricos – ratón (66%), teclado (55%), auriculares (55%) y monitor (44%), así como la ampliación de la memoria del equipo a través de dispositivos externos (55%).
Pese a que la adaptación al trabajo en remoto ha sido dura, el 71% de las organizaciones asegura no haber tenido problemas significativos a la hora de implementarlo. De acuerdo con la encuesta, la oferta de los fabricantes de material informático se ajusta de manera satisfactoria a las necesidades de los departamentos de TI. Es más, a raíz del confinamiento, da la sensación de que estas marcas han cubierto mejor las necesidades de las empresas, ya que el porcentaje de aquellos que no encuentran nada que demandarles asciende de forma significativa en aquellas organizaciones que comenzaron a trabajar en remoto desde el confinamiento o tras él – 47% antes del confinamiento vs 67% desde el confinamiento vs 80% tras él –.
“A pesar de las disrupciones que hemos vivido a causa del COVID-19, los fabricantes hemos dado con la tecla para poder apoyar a las organizaciones en los momentos en los que más lo necesitaban”, comenta Emiliano Nicoloro, SYS Country Head de ASUS España. “De acuerdo con los datos de la encuesta de ASUS, estamos en un punto en el que los departamentos de TI necesitan dispositivos potentes y con altas prestaciones que permitan a sus trabajadores tener la flexibilidad que se requiere para trabajar desde cualquier parte, al tiempo que son eficientes y operativos. Pero solo con eso no es suficiente, sino que para una productividad real se necesita una infraestructura completa (periféricos, conectividad, etc.) y un partner de confianza que acompañe a los responsables de TI en el camino y les ofrezca un servicio técnico de excelencia”.